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Una armadura, por definición, es el conjunto de piezas defensivas con que se revestían los combatientes.
Las primeras armaduras empezaron a usarse en el segundo milenio antes de Cristo, en lo que hoy conocemos como Oriente Próximo. Posteriormente, los egipcios copiaron y adaptaron a sus necesidades los modelos sirio-palestinos de sus armaduras. Los griegos y los romanos también aportaron mucho al desarrollo del diseño de armaduras.
Las primeras armaduras fueron fabricadas con pieles de animales. Posteriormente, como material para proteger el cuerpo ante el ataque de una espada enemiga, empezaron a usar cuero y más tarde diferentes metales.
Al principio las armaduras no cubrían todo el cuerpo del guerrero, sino solo las partes más importantes del mismo, como la cabeza y el tronco, una herida en cualquiera de estas podría provocar la muerte inmediata. Solo en la Baja Edad Media empezaron a utilizar armaduras para todo el cuerpo, es decir, armaduras en su sentido más clásico, como nosotros estamos acostumbrados de imaginarlas.
Los guerreros griegos o hoplitas, como también se los conocen, llevaban una coraza de cuero cubierta de placas metálicas y canilleras para la protección de piernas. A menudo se usaba otro tipo de armadura todavía más simple, que consistía en un peto y una espalada, que se unían por correas de cuero. Además, estos guerreros iban provistos de un casco, que podía ser de distintas formas, pero el más popular era el que tenía una visera y un apéndice nasal. El cuello y la zona de las ingles permanecían sin protección.
En la Antigua Roma, encontramos distintos tipos de armaduras, dependiendo del rango y tipo de soldado al que pertenecía.
La armadura que llevaban los romanos durante los siglos I a.C. – III d.C. se llamaba Lorica segmentada. Se componía de varias bandas metálicas, normalmente fabricadas en hierro. Las piezas de esta armadura estaban unidas por otras bandas de cuero verticales y se disponían sobre el cuerpo del soldado horizontalmente, rodeando así su pecho y su espalda.
Más tarde los romanos empezaron a usar otro tipo de armadura, que se llamaba Lorica hamata. Era una armadura de cota de malla, que se solía fabricarse en bronce o hierro. Su estructura consistía en una serie de filas de anillos verticales y horizontales entrelazados entre sí, que tenían entre 5 y 7 mm de diámetro aproximadamente. Era una armadura muy flexible y resistente.
Entre las armaduras romanas también hay que destacar la armadura usada por los gladiadores, que se componía de un gran escudo oblongo, un casco con visera, cresta y cimera de plumas, una ócrea o greba en la pierna izquierda, y un brazal de cuero o metal que cubría en parte el hombro en el brazo derecho.
Los guerreros mongoles solían utilizar armaduras ligeras que se ponían sobre camisas de seda. Este tipo de armadura era perfecto para protegerse contra los ataques de arqueros, puesto que la seda envolvía a la flecha y penetraba en la herida con ella, lo que suavizaba muchísimo el golpe y permitía al guerrero sacar la flecha sin hacerse mucho daño. Pero para combates cuerpo a cuerpo no eran tan efectivas estas armaduras.
La armadura de oriente consistía en cientos de piezas rectangulares de hierro, cuero o bronce. Estas piezas tenían pequeños agujeros en distintas zonas, a través de las cuales eran enlazadas entre sí en filas horizontales. Las láminas de cuero se endurecían con un proceso especial. La armadura de oriente fue diseñada para ser lo más ligera posible. Para proteger la parte baja del cuerpo, utilizaban una falda acampanada llamada kusazuri.
La armadura normanda se diferenciaba de las demás principalmente por su doble refuerzo de cota de malla, pese a lo cual seguía siendo ligera e incluso cómoda para usar, tanto por los soldados de a pie como por los de caballería. Las piernas a menudo estaban protegidas por brafoneras abiertas por detrás. El yelmo contaba con la protección nasal, podía ser de una sola pieza o de cuatro segmentos unidos por cuatro bandas de hierro rematadas por una pieza circular en la parte superior.
<h3">Armadura medieval
En la Edad Media las armaduras se convirtieron en estas maravillosas piezas históricas, que aparecen inmediatamente en nuestra imaginación al escuchar la palabra “armadura”. Son construcciones articuladas complejísimas, que llegaban a tener hasta 250 piezas distintas y que pesaban entre 25 y 45 kg. Las piezas más importantes se reducen a unas 25, estando distribuidas por la cabeza, tronco, extremidades superiores e inferiores.
En general, podemos afirmar que cada una de las armaduras medievales tenía sus particularidades, es decir, eran piezas únicas. Las mayores diferencias, que además se pueden apreciar a simple vista, las encontramos entre las armaduras de los cruzados y las armaduras de los conquistadores.
En el periodo de las Cruzadas, la armadura que se usaba se llamaba la loriga, y estaba formada por cota de malla. La cota se ponía sobre un jubón acolchado, que se conoce como gambesón, y que servía para amortiguar los golpes de los enemigos. Sobre la loriga se colocaba una cota de metal, que, con el tiempo, sería adornada con emblemas y símbolo distintivos.
Entre los elementos más importantes de la armadura medieval de los cruzados podemos nombrar los siguientes:
· El yelmo o “casco de cruzado”.
· La cota de malla.
· Coraza.
· Extremidades superiores.
· Extremidades inferiores.
· Túnica.
Los conquistadores, rara vez usaban armaduras completas, prácticamente nunca, por varias razones. La primera de ellas es que este equipamiento era muy caro. La segunda, es que, de este modo, sin armadura completa, los soldados tenían mucha más libertad y agilidad de movimiento. Y, por último, el clima tan caluroso y húmedo del Nuevo Mundo, hacía agotador el uso de las armaduras completas.
Entre los elementos más importantes de la armadura de conquistador podemos enumerar los siguientes:
· El casco.
· La cota de malla.
· El escudo.
· El peto.
En esta categoría te ofrecemos descubrir tanto armaduras completas como parciales, para que las puedas lucir en alguna recreación histórica o de película, o quizás darle un toque especial y único a tu hogar. Así que, si te gusta viajar en el tiempo, esta categoría es para ti.
Por Ana Isabel R. el 25 Nov. 2022 :
Por Antonio B. el 11 Ene. 2021 :
Por Antonio B. el 08 Ene. 2021 :
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